El engranaje cónico en espiral se define comúnmente como un engranaje en forma de cono que facilita la transmisión de potencia entre dos ejes que se cruzan.
Los métodos de fabricación juegan un papel importante en la clasificación de los engranajes cónicos, siendo los métodos de Gleason y Klingelnberg los principales. Estos métodos dan como resultado engranajes con formas de dientes distintas, y la mayoría de los engranajes se fabrican actualmente utilizando el método Gleason.
La relación de transmisión óptima para engranajes cónicos generalmente se encuentra dentro del rango de 1 a 5, aunque en ciertos casos extremos, esta relación puede llegar hasta 10. Se pueden proporcionar opciones de personalización, como orificio central y chavetero, según requisitos específicos.