Los engranajes cónicos de Gleason para el mercado de automóviles de lujo están diseñados para proporcionar una tracción óptima gracias a una sofisticada distribución del peso y a un método de propulsión que "empuja" en lugar de "tira". El motor está montado longitudinalmente y está conectado al eje de transmisión mediante una transmisión manual o automática. Luego, la rotación se transmite a través de un conjunto de engranajes cónicos desplazados, específicamente un conjunto de engranajes hipoides, para alinearse con la dirección de las ruedas traseras para la fuerza motriz. Esta configuración permite un mejor rendimiento y manejo en vehículos de lujo.